Lupita: la interpretación de la inocencia
Lleva cinco años defendiendo los derechos de los indígenas. Supervisa los casos escuchando y empatizando con cada persona. Controla que cada acusado tenga un traductor en su lengua, en su variante específica, para no dar lugar a error. Ante la justicia un leve fallo puede suponer perder tu libertad. Esa es la razón por la que Lupita ha creado la asociación Nochaba Nikuuroka Anakupí Niraa —que en lengua rarámuri significa “Trabajar ayudando los unos a los otros”—, una organización apartidista, autónoma y sin ánimo de lucro para ofrecer asesoría y orientación legal en diferentes lenguas indígenas a personas que lo necesitan.
La discriminación lingüística conlleva la violación de los derechos humanos en muchos casos. Personas como Lupita trabajan para que las culturas indígenas lleguen a tener el reconocimiento y el espacio que merecen ante la ley. No puede existir una igualdad para todos mientras no exista la posibilidad de que cada uno se defienda en la lengua que domina. Tratar de explicar tu situación en un idioma que desconoces no es estar en igualdad de condiciones. Hay casos en los que esta marginación, o despreocupación por las lenguas minorizadas, conduce a sentencias injustas que son resultados de malas interpretaciones. Presos que desconocen sus cargos o sus años de prisión.
Los intérpretes rompen con el concepto de que las lenguas son barreras para la comunicación. Gracias a su trabajo, muchas personas no se han sentido minorizadas ante la ley. Cuando los acusados se presentan frente a la auditoría pueden sentir que hablan una lengua inútil: «Hay veces que las personas que hablan español no entienden la sentencia del juez. Entonces yo pienso: Si ocurre esto con las personas que hablan el mismo idioma, ¿cómo se sentirá mi gente?», confiesa Lupita. «Cuando voy a los cerezos para revisar los casos de los indígenas que estan presos, muchos me confiesan que nadie ha ido a hablar con ellos, que no se han podido comunicar con nadie», añade. Lupita nos hace ver que este tipo de situación provoca que algunas personas consideren que su idioma es un obstáculo, que incita al abandono de su lengua y que convierte al propio pueblo en cómplice del homicidio de su cultura. Queda claro que ninguna lengua puede quedar indefensa, pues tras ellas están las personas. “Lo que he logrado ha sido con mucho esfuerzo, llamando a muchas puertas, pero ha merecido la pena. Cada vez los derechos indígenas ganan más espacio. Ahora ya toman más atención porque saben que hay alguien chequeando. Soy la piedra de su zapato”.
Una labor de investigación y lucha inmensos, gracias a Lupita y gracias a Alejandra por sus enseñanzas y por su lucha. Sois grandes.
Me parece excelente el trabajo que realiza Lupita
Es una gran labor humanitaria con los suyos, con los indígenas
Animo Lupita a seguir adelante que todavia falta camino por recorrer. Y seguir cosechando muchos logros.